Desde hace ya varios meses y especialmente en las últimas semanas, he escuchado por radio, en carritos por puesto, busetas y afines; y he visto en la calle y por televisión, una tras otra las propagandas políticas de los candidatos a la gobernación… Acusaciones mutuas de corrupción y promesas que ofrecen seguridad, empleo, salud, mejorar la vialidad e infraestructura del Estado… Ambos van a dar y a hacer de todo, solamente que ninguno dice cómo...
En los últimos días los candidatos han presentado y publicitado sus “Programas de Gobierno”… pero un programa de gobierno no pueden ser cinco promesas y un doble plagio a un juramento de El Libertador; ni cinco promesas y las denuncias de la corrupción e ineficiencia chavista. Esos no son planes de gobierno, ¡Ninguno de los dos!, son pura retórica y burdo proselitismo político…
En un plan de gobierno de verdad, cuando se habla por ejemplo, de mejorar el sector salud; deben explicar cómo lo van a hacer; cuántos hospitales o ambulatorios existen; cuántos necesita el Estado; cuántos van construir; en cuánto tiempo los van a construir; qué capacidad van a tener; cómo van a garantizar la dotación de insumos; de dónde van a salir los recursos; cómo y cuánto le van a pagar a los médicos, enfermeras, camareras, etc…
También tienen que explicar cuál será la política epidemiológica, preventiva y el plan de inmunizaciones que se va a manejar en la región; determinar cual va a ser exactamente la relación y el trato entre la Secretaría de Salud y los estudiantes de medicina; formular las metas que en materia de salud esperan alcanzarse en esos 4 años de gobierno y establecer cuáles son los indicadores que van a medir el éxito o fracaso de la política sanitaria de ese Plan de Gobierno, entre muchos otros aspectos… ¡Esto sólo en el sector salud!... y así tienen que explicar cómo van a abordar los otros sectores; cómo van a dar seguridad, trabajo y vivienda… tienen que decir cómo carajo es que van a hacer realidad todo lo que ofrecen; ¡Eso es un plan de gobierno!, porque sino lo explican así, entonces es puro discurso…
Mientras que los planes de gobierno más inteligentes y brillantes de nuestros candidatos se traten de: burlarse de “Los gallos de Goyo” o de decir que “A los Montilla se les acabó la Mantequilla”, tendremos Gobernadores que llegarán al poder no por sus capacidades e ideas para gerenciar el estado, sino por tener la mejor campaña publicitaria, por lo malos que hayan sido sus predecesores o por la cantidad de dinero que tengan para comprar conciencias…
Dicen que “Los pueblos tiene el gobierno que se merecen”, y si eso es así, a Falcón le hace falta mucho por madurar y crecer como ciudadanos, puesto que el falconiano eligió tanto a Curiel como a Montilla, y contribuimos a sentar al tercio aquel en Miraflores… por eso, nos merecimos a Curiel, nos hemos merecido los 8 años de Montilla, nos merecemos (no se hasta cuando) al que está en Miraflores y nos mereceremos al Gobernador que gane el próximo 23 de Noviembre. Será entonces, cuando veamos si el falconiano ha aprendido algo o si estamos iguales.
Por otro lado, la diferencia entre uno y otro candidato a la gobernación es -a mi juicio- que la señora garantiza la continuidad, y el señor el darle un parao en Falcón, al llamado proceso revolucionario, que lleva casi diez años destruyendo al país y dejándonos cada vez más estancados y atrasados. En cualquier caso, el próximo 23 de Noviembre, gane quien gane, Falcón tendrá el gobierno que se merece.
Luis Aular Leal.
En los últimos días los candidatos han presentado y publicitado sus “Programas de Gobierno”… pero un programa de gobierno no pueden ser cinco promesas y un doble plagio a un juramento de El Libertador; ni cinco promesas y las denuncias de la corrupción e ineficiencia chavista. Esos no son planes de gobierno, ¡Ninguno de los dos!, son pura retórica y burdo proselitismo político…
En un plan de gobierno de verdad, cuando se habla por ejemplo, de mejorar el sector salud; deben explicar cómo lo van a hacer; cuántos hospitales o ambulatorios existen; cuántos necesita el Estado; cuántos van construir; en cuánto tiempo los van a construir; qué capacidad van a tener; cómo van a garantizar la dotación de insumos; de dónde van a salir los recursos; cómo y cuánto le van a pagar a los médicos, enfermeras, camareras, etc…
También tienen que explicar cuál será la política epidemiológica, preventiva y el plan de inmunizaciones que se va a manejar en la región; determinar cual va a ser exactamente la relación y el trato entre la Secretaría de Salud y los estudiantes de medicina; formular las metas que en materia de salud esperan alcanzarse en esos 4 años de gobierno y establecer cuáles son los indicadores que van a medir el éxito o fracaso de la política sanitaria de ese Plan de Gobierno, entre muchos otros aspectos… ¡Esto sólo en el sector salud!... y así tienen que explicar cómo van a abordar los otros sectores; cómo van a dar seguridad, trabajo y vivienda… tienen que decir cómo carajo es que van a hacer realidad todo lo que ofrecen; ¡Eso es un plan de gobierno!, porque sino lo explican así, entonces es puro discurso…
Mientras que los planes de gobierno más inteligentes y brillantes de nuestros candidatos se traten de: burlarse de “Los gallos de Goyo” o de decir que “A los Montilla se les acabó la Mantequilla”, tendremos Gobernadores que llegarán al poder no por sus capacidades e ideas para gerenciar el estado, sino por tener la mejor campaña publicitaria, por lo malos que hayan sido sus predecesores o por la cantidad de dinero que tengan para comprar conciencias…
Dicen que “Los pueblos tiene el gobierno que se merecen”, y si eso es así, a Falcón le hace falta mucho por madurar y crecer como ciudadanos, puesto que el falconiano eligió tanto a Curiel como a Montilla, y contribuimos a sentar al tercio aquel en Miraflores… por eso, nos merecimos a Curiel, nos hemos merecido los 8 años de Montilla, nos merecemos (no se hasta cuando) al que está en Miraflores y nos mereceremos al Gobernador que gane el próximo 23 de Noviembre. Será entonces, cuando veamos si el falconiano ha aprendido algo o si estamos iguales.
Por otro lado, la diferencia entre uno y otro candidato a la gobernación es -a mi juicio- que la señora garantiza la continuidad, y el señor el darle un parao en Falcón, al llamado proceso revolucionario, que lleva casi diez años destruyendo al país y dejándonos cada vez más estancados y atrasados. En cualquier caso, el próximo 23 de Noviembre, gane quien gane, Falcón tendrá el gobierno que se merece.
Luis Aular Leal.