"Con la señal de costumbre..."

Este año hay elecciones de la Asamblea Nacional… y al parecer están de moda las salidas: la salió Müller Rojas del PSUV; salió Radio Caracas de la TV por cable; salió Henry Falcón del Chavismo y salió Ricky Martin del closet… y así han salido, pero a la luz pública, miles de precandidatos y candidatos a la Asamblea Nacional.

Se pelean, se matan y se vuelven locos, por demostrar quién es más chavista que Chávez o cuál es el opositor más opositor de los opositores. Primarias, internas, externas, encuestas, exámenes orales, escritos, prostáticos, ginecológicos, desfiles en traje típico, traje de gala y traje de baño entre otros métodos, han sido utilizados para determinar, cuál de los mismos de siempre (en la mayoría de los casos) será candidato a la Asamblea Nacional.

Todos salen en la prensa, con sus sonrisotas para que los compre quien no los conoce. No obstante, estamos en un momento crítico para el país, en el que no podemos darnos el lujo de andar votando por gente que está rayada moral, política y administrativamente, tanto en el chavismo como en la oposición. Pero algo bueno debe quedar en algún lado… Por ejemplo, en la oposición existe uno que otro precandidato de vida pública y profesional admirable, con propuestas serias para llevar al parlamento... sin embargo, los vándalos y momias políticas de la “unidad” siempre se empeñan en aparatar a gente así; ojalá no lo hagan ésta vez.

En el chavismo también debe haber alguien honesto, que represente la reserva moral de la “revolución”, pero las neomafias rojas rojitas lo alejan de cualquier candidatura. Por eso los candidatos siempre son los mismos; algo similar a lo que tanto le cuestionaban a AD y COPEI. Es decir, hoy en el chavismo existen: Alfaros Uceros, Piñerúas Ordacez, Canaches Matas y por su puesto un solo “Rafael Caldera” que siempre será el candidato presidencial del partido… ¡Dios, es que se parecen tanto, que asusta!.

Hace cinco años, cuando se eligió la actual Asamblea, la oposición se negó a participar porque el CNE no era un árbitro confiable (cosa que podía ser cierta); pero se lanzaron por ese despeñadero, que dio como resultado un parlamento monocolor; calentador de puestos, cobrador de sueldos y expertos en aprobar todo “con la señal de costumbre” de acuerdo a los deseos y caprichos del Máximo Líder… pero si no hay oposición, ¿Qué mas van a hacer?...

Durante todo éste tiempo, la Asamblea ha pasado sesiones enteras, aprobando cosas como: “Acuerdo de Salutación al Presidente Evo Morales”; “Acuerdo en apoyo al pueblo Palestino”; “Acuerdo para regalarle siete plantas eléctricas a Nicaragua”; “Acuerdo para decirle a Bush que estamos bravos con él, pero que le seguimos vendiendo petróleo"; “Acuerdo para asfaltar 700 kilómetros de carretera en Bolivia”; “Acuerdo para autorizar al Presidente a que se vaya de viaje y regale más dinero a Cuba, Ecuador, Brasil, Argentina, Bielorrusia, etc…”…cuando aquí hace falta tanta plata para mantener y construir escuelas, hospitales y todo lo que sabemos...

…Pero es que ser diputado, debe ser de pinga… tener un sueldazo, teléfonos pagados, transporte a cualquier parte del país, seguro de HCM en clínicas privadas, inmunidad parlamentaria y guardaespaldas, solo por levantar la manito “con la señal de costumbre” y pasar todo el día en los cómodos asientos del hemiciclo.

Por mi parte, me estoy preparando para cuando vengan a pedirme el voto; ya sea un corrupto ineficiente chavista; o un dinosaurio político y oportunista de la oposición; en ambos casos, extenderé mi brazo y en mi mano extenderé el dedo medio, flexionando todos los demás, para responderle a éstos sin vergüenzas, “con la señal de costumbre”.

Luis Aular Leal.